Las molletenses seducen en Bon Pastor con un juego muy vistoso en un partido sentenciado en la primera parte.
Sant Gervasi Mollet, las subcampeonas de la Copa Colegial 2019 que se quedaron con la miel en los labios tras perder en el último segundo de la final, volvían a escena en esta edición. Para empezar, partido a prioriasequible contra Bon Pastor. Pero no se podían confiar ni un miligramo las de Mollet: la pista de Bon Pastor nunca es fácil. Un patio pequeño y lleno de gente esperaba a la escuadra dirigida por Toni Garcia para ponerle las cosas difíciles desde el primer segundo.
Laia Gutiérrez i Laia Miquel –conocidas como “las Laias” de Mollet- abrían el melón del último partido de la jornada en este #FunnyFriday colegial. Los tanteos iniciales daban una ligera ventaja a Sant Gervasi hasta el primer tiempo muerto solicitado por coach Solà, que insuflaba a las suyas un plus de energía para que no se descolgaran a las primeras de cambio. Con 3 a 6 en el marcador, y entre vítores del público, Bon Pastor no reaccionaba aun y el timeouty las de Sant Gervasi demostraban que jugar fuera de casa también se les da bien. Júlia Costa en el rebote y las Laia’s en la penetración a canasta se mostraban matadoras y se apuntaban un parcial cómodo para las del Vallès (5-15).
En la reanudación, Laura López marcaba tendencias y mantenía en alza a su equipo. El ritmo de juego estaba siendo incesante en las filas molletenses, mientras que en la bancada de Bon Pastor estaba fallando el acierto a canasta más que las ganas que le ponían las jugadoras, que eran indiscutibles. Maria Riera devolvía la ilusión a las de amarillo, pero rápidamente se encargaba Carme Hervás de romper la defensa en zona de Sant Gervasi Mollet para apagar el incendio (o más bien dicho, la chispa) que había provocado la local Riera. En los siguientes minutos, toma y daca constante desde la línea de 6’25. Maria Morillas, incisiva y demoledora, encestaba un nuevo triple y el luminoso se disparaba a un voluptuoso 9 a 30. Como un cohete estaban jugando las de naranja y violeta, que no habían perdido el fuelle y el rushque las catapultó en la pasada entrega a la final colegial de Barcelona. Tras repartir palizas a diestro y siniestro en 2019, esta era una nueva oportunidad para Sant Gervasi para hacerse notar y hacer ver que Mollet es una capital del basket. Al final de esta primera mitad, 11 a 32.
Sin lugar a dudas, Bon Pastor reaccionaría al inicio de la segunda mitad. Míster Solà, un clásico de la Copa Colegial como entrenador, había puesto las pilas a las suyas en el descanso. Las jugadoras locales regresaban a pista con otra cara, mucho más motivadas que en los dos primeros periodos, y se fiaban de Alèxia Galán para contrarrestar una rocambolesca canasta “a la remanguillé” de Júlia Costa. No obstante, aun y la clarísima reacción y el nuevo aspecto de Bon Pastor, las anfitrionas no lograban acercarse en el marcador. Las distancias fluctuaban constantemente sobre la veintena de puntos (18-40, min 22) y Sant Gervasi Mollet no dejaba de pisar el acelerador. El combinado capitaneado por Toni Garcia tiene la virtud de no dejarse ir en ningún momento del partido. Ya lo hicieron el curso pasado en todas las fases del torneo y, por lo que parece, este año siguen todas on fire.
Antes de acabar el 4º cuarto, pique entre el entrenador local y uno de los árbitros. Esto acabaría suponiendo una sanción: falta descalificante, expulsión de Solà y suspensión de los tiros libres BIE de Bon Pastor. A todo esto, Bon Pastor no levantaba cabeza en el acto definitivo y la distancia entre un equipo y otro era cada vez más grande. El 20 a 59 en el electrónico, sin embargo, no rebajaba los gritos y no acallaba las palmas de la grada, que seguían animando a su colegio. Y es que a veces las derrotas no significan decepción: cuando las jugadoras de Bon Pastor vienen un viernes al patio del colegio a jugar su mejor baloncesto delante de sus padres, madres y amigos, no queda otra que aplaudirlas. Y mucho. Al cierre, resultado de 24 a 63. Sant Gervasi, sin inconveniente alguno para solventar su debut, ya tiene la mente puesta en la siguiente ronda. Bon Pastor, sin opciones de repesca, lo volverá a intentar en 2021. Y es que para sus chicas este ha sido un San Valentín de divorcio con la Copa Colegial.
Judith Gil (Bon Pastor) y Maria Morillas (Sant Gervasi Mollet) fueron elegidas MVP’s del partido.
